Páginas

2.26.2009

¿Que moral tiene Héctor Ferrer?

Luis Fortuño viene diciendo que va a reducir el gobierno. Va a botar gente. En estos días se escucha que serán unos 20,000. El número en realidad no es lo que importa aquí. Es la gente que se va a quedar sin trabajo. Yo sé lo que es estar sin trabajo. Se vive cada día nervioso y contando cada dolar que se tiene para ver de que manera rinde más. El dinero del desempleo no es suficiente. Se vive míseramente. Eso es lo que viene en estos días cuando se anuncie el despido masivo de empleados de gobierno.

Pero me da asco la actitud de Héctor Ferrer el presidente del Partido Popular Democrático. Da asco ver como este esclavista que propuso durante el cuatrienio pasado aumentar la jornada de trabajo a diez horas ahora se presenta como un defensor de los trabajadores. Todavía tengo en la memoria las dos semanas que nos tiraron a la calle y este infeliz no dijo nada. Apoyó el cierre gubernamental y puso a muchos trabajadores en la incertidumbre de verse sin trabajo. Ahora dice que hay que hacer "alianza contra despidos en el gobierno".

Dan ganas de escribir malo. De escribir muchos insultos y palabras soeces que aunque tengo la libertad de hacerlo me amarran unos principios cristianos que me frenan. Creo que ya pequé pensando pero este señor es bien descarado al decir algo así ahora.

Esto, lectores(as) es la política, el arte más sucio de mantener a la gente con esperanzas mientras los engañas para robarles. El arte de aliarte con los necesitados y los desesperados cuando te conviene. El arte de aparentar que te importa el dolor de la gente. Héctor Ferrer no sabe lo que es pasar miseria, hambre ni vivir cada día racionanado la comida. Él no sabe lo que es echarle agua a una botella de ketchup para rendirlo y echárselo a un arroz blanco porque no hay nada más. Ese infeliz no ha escuchado nunca a un niño llorar de hambre. Ni él ni desgraciado de Luis Fortuño que tiene en La Fortaleza a un Chef que cobra 5,000 mensuales. Esos dos a la hora de la verdad comen en el mismo plato y tienen unos mismos jefes, los desgraciados bonistas que tienen a esta isla por propiedad y la corren como una corporación. Eso es la política asquerosa que ha regido en esta maldita colonia desde el 1952.

Los bonistas necesitan hacer dinero así que como toda corporación se reduce empleados. Se bota gente a la calle. Pero este artículo no es sobre los bonistas. Héctor Ferrer es un hipócrita. Ahora los tontos útiles verán en él un defensor de los trabajadores. Ya los veo en marchas y no digo que esté mal, expresarse contra el abuso pero quien convoca a esto, no lo olviden, fue uno de los que en el 2006 los botó a la calle en el mes de mayo. En aquel momento él no convocó ninguna alianza...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta con libertad y recuerda que yo no tengo la razón y estoy dispuesto a aprender si me corrigen. Por favor no insulten.