Prometeo vs los fupistas: Parte II: "La primera bofetada es gratis, la segunda te costará..."

Ayer les conté como en mi último día de clases tuve que enfrentar finalmente a la plaga fupista que invade el sagrado Colegio Universitario de Cayey. Hoy continúo con la segunda parte de mi batalla contra esos seres que solo saben fumar yerba y cobrar beca para ponerse camisetas del Ché Guevara o Albizu.

Luego que aquel muchacho de pelo largo y ademanes afeminados salió del baño comenzó a gritar, "¡LUCHA SÍ, ENTREGA NO!" Esuché un tropel de gente corriendo al edificio donde estaba. Salí dispuesto a enfrentar mi destino. Yo contra 28 fupistas yerberos moteaos, embollaos y con los ojos coloraos...

Una de las primeras cosas que le enseñan a uno en ninjutsu es a contar las salidas y posibles rutas de escape. Al entrar al baño del Morales Carrión tenía a mi derecha el Anfiteatro y la salida, a la izquierda tenía el pasillo y otra salida y de frente las escaleras para el parking. Los yerberos de la izquierda tenían bloqueada la salida y la escalera. Querían que me metiera al pasillo para acabarme ahí. Es una técnica muy utilizada pero yo tenía otros planes...

Cuando uno está rodeado el manual de ninjutsu dice que las opciones son 1. esconderse 2. huir 3. distraer para poder hacer la 1 o la 2. Para mí la opción era la 3 porque ya el muchacho del pelo largo sabía donde estaba y se quedó frente a la entrada para segurarse de que yo no saliera. El hecho de que los 28 yerberos estuviesen bloqueando las entradas me decía que sabían lo que iban a hacer y tenían esto planificado. No fue casualidad que ese tipo entrara al baño. NI SIQUIERA USÓ EL BAÑO...

Escuché afuera mientras el pelú les decía que iba a entrar para provocarme a salir. Pero mientras el repartía instrucciones yo estaba destornillando la ventana encima del baño del primer piso. Un ninja siempre anda con sus herramientas y yo no dejo mi cuchilla multiusos en ninguna parte. También tengo los kunais y algunos shuriken. Destornillé la ventana y salí poco a poco sin hacer ruido. Le puse seguro a la puerta del cubículo del baño y dejé unos zapatos al frente del toilet pa que creyeran que estaba allí. Salí afuera y escuchaba al muchacho del pelo largo decir, "Sal afuera, cobarde cristiano." Aguanté las ganas de reír, ¿quién es el cobarde, yo o un tipo que necesita a 28 pa que lo ayuden?

Salí corriendo hacia la cafetería para esconderme pero en eso un gordito estaba mirando y gritó, "!Camaradas ahí va el enemigo de la patria ese!" Iba a tener que correr pero eso no me preocupaba porque los gorditos no corren mucho y los yerberos tienen los pulmones dañaos por tanto humo de cannabis que inhalan. Esconderme no iba a poder ser una opcion.

En eso me fijé que el tipo del pelo largo me estaba alcanzando. El tipo estaba en forma, y eso es raro en un fupista yerbero. Me alcanzó en la oficina de Servicios Médicos y me bloqueó el paso. Ahí comenzó a gritar, "¡Muerte al YANQUI!" "Pero si yo soy trigueño"--le dije asombrado--"Yo soy más boricua que tú porque tu eres blanquito." Eso lo enojó más. En eso llegaron los tipos más flacos. Los gorditos del MST estaban cogiendo aire en el monumento frente a la cafetería, el que parece un mojón gigante (Si eres del CUC sabes de que hablo. Si eres de mi iglesia no me chotees con el pastor por escribir la palabra "mojón" en Facebook. Es la última vez que escribo "mojón".)

Los chamacos comenzaron a rodearme. Comencé a repasar lás tácticas de ninjutsu en esas ocasiones. Hay que romper el círculo para que no rodeen a uno y buscar un espacio cerrado donde los tengas en fila. Eso no iba a ser posible así que me quedaba el campus. Esto iba a ser difícil...

En el ninjutsu se enseña a dialogar para que le quites las ganas al otro de pelear. "Vamos amigo."--le dije al pelí apestoso--"Ya me disculpé contigo. No veo la necesidad de una confrontación." El pelú solo me miraba fijo con ojos de odio y comunismo enyerbado. Entonces le dije, "¿Porqué no dejan el 'sucialismo' y nos hacemos amigos?". Eso lo hio enojar más. Hay dos cosas que enojan a un fupistas, que no tengan yerba en el punto y que le relajen su ideología. También les enoja cuando en vez de yerba les meten orégano cuando van a las Justas. Y les enoja escuchar a americanos felices cantar el himno de EEUU. Yo solo dije por error "sucialismo", se me hace difícil no trollear cuando estoy nervioso. Los otros que estaban rodeándome se pusieron a resoplar como toros cuando dije "sucialismo" y eso no era buena señal.

Mientras planificaba a quién le iba a reventar la quijada para romper el círculo el pelú afeminado se me acercó y me dijo, "Así que tu eres Michael Castro..." [Insertar música de tensión aquí]. yo me quede sorprendido. "¿Como sabes mi nombre?"--pregunté asombrado. "Mis jefes me llamaron para acá porque tú estabas acabando con los camaradas fupistas y dejando a este colegio sin izquierda."--me dijo molesto. Esta vez la voz s le oía un poco más fuerte. Parece que había pasado la pubertad en esos minutos. "Yo sé todo de tí."--me dijo con una sonrisa socarrona--"Eres Prometeo, el bloguero más leído en Puerto Rico." "Espero que si sabes eso le des c**** a los *a******* de ** ***** (la clausula de mi contrato con Blogger prohibe que escriba lo que quiero decir. En serio. Me pueden cerrar el blog si escribo eso completo pero cada ley tiene sus rendijas. JEJEJE...) Entonces con sus ojos rojos me dijo--"No me importa quién seas. Estamos hartos de tus ataques a la causa socialista."--y entonces gritó--"Hoy termina tu vida sucio bloguero y asqueroso @#$%$Q@$%"

Entonces lo miré con esta cara que solo los que han salido por el techo cuando los miro saben como se ve y le digo--"Yo no quiero pelear pero si quieren una pelea tienen que atacarme primero." "¿Vas a pelear?"--preguntó el pelú--"¡Pero si tu eres cristiano!, ¿No se supone que pongas la otra mejilla?". "Es cierto."--contesté riéndome--"La primera bofetada es gratis. La segunda te costará trabajo, mucho tabajo... Solo si logras pegarme dos veces en la cara responderé a tu ataque, ese es mi nindo, mi estílo de ninjutsu." El muchacho me miró y se rió--"Debes saber que soy practicante del estílo de Praying Mantis, el de Wang Lang." Me sorprendí. Yo estudié ese estílo hace tiempo antes de irme al ninjutsu. Si lo que decía era cierto entonces esto iba a ser más difícil de lo que pensaba. Recordé el tiempo cuando practicaba y vino a mi mente un flashback de cuando me enseñaban a hacer la forma del mantis. Fue mucho lo que aprendí. Ese estílo se caracteriza por la rapidez así que este muchacho iba a darme mucho trabajo. De momento miré alrededor y ví que los fupistas estaban asumiendo la posición de las 7 estrellas, la posición de pelea inicial de el estílo de Mantis. Ahi fue cuando el corazón me dió un salto. Si estos tipos estaban entrenados mi vida corría peligro de verdad.

"¿Listo para tu primera bofetada Prometeo?"--me dijo el pelú--"No creo que puedas estar de pie para la segunda." "Eso hay que verlo."--contesté mirándolo con la mirada de Chuck NOrris pero no se intimidó--"¿Cual mejilla quieres golpear primero, la izquierda o la derecha?" El pelú me miró y me dijo--"La derecha, porque yo soy de la izquierda y no creo que llegue a pegarte la segunda bofetada." Me eché a reír y le dije--"Sabía que ibas a decir algo así..."

El tipo asumió la posición del arquero e hizo la "garra del leopardo", sabía kung fu de verdad. Esto iba a doler....MUCHO. La garra del leopardo es una de las técnicas más letales para pelear con manos abiertas. Yo me paré con los pies en posición natural. El muchacho hizo un movimiento rápido y me pegó en el cachete derecho. Ví un par de estrellas y me chillaron un poco los oídos pero mis pies se mantuvieron en la misma posición. Cuando estudiaba kung fu aprendí que para contrarrestar ese golpe había de moverse rápidamente en la dirección del golpe justo antes del momento de impacto. Es difícil y si lo haces mal puede perder la cabeza. Me salió bien. Escupí un poco de sangre al piso y lo miré--"¿Eso es todo?". Los tipos alrededor hicieron gestos de asombro. El muchacho estaba un poco asombrado también. Le dije--"Yo estudié tu estílo hace varios años atrás."--"Ahora pégame en la mejilla izquierda..."



En el próximo capítulo: "La mejilla más difícil y una serpiente cansada..."