Pastores mentirosos y pillos

*Antes que nada quiero aclarar que soy cristiano y pertenezco a la Iglesia Pentecostal.

Hace tiempo leía en un post de Ivonne Acosta acerca de las jóvenes de Puerto Rico que por tener ingresos prefieren salir embarazadas. Sí, amigos de otros países que leen este blog, en este país las mujeres que no trabajan y salen embarazadas se les premia monetariamente con ayudas del gobierno. El caso es peor aún, cuando esas jóvenes no trabajan se les dan ayudas y se les provee de casa y el gobierno les subsidia la luz el agua y el servicio telefónico. Para colmo de males están exentas de pagar contribuciones y si se consiguen un trabajo les quitan las ayudas. Como requisito para mantener las ayudas no pueden casarse y es milagrosa la forma en que paren cada año sin un varón en la casa.

Lo más deplorable de este panorama es que en las iglesias del país no se llama la atención sobre este asunto. Muchas personas recipientes de los Programas de Asistencia Nutricional (PAN) son miembros de distintas iglesias del país, la mayoría de ellas pentecostales. En todos los años que llevo siendo pentecostal NUNCA he escuchado a un pastor llamar la atención sobre este asunto, ni tan siquiera comentar.

¿Por qué? La razón es monetaria. Muchas de estas personas aportan económicamente a las iglesias con ofrendas pues es fácil dar lo que fácil se gana. No estoy diciendo que todas las personas recipientes del PAN sean así, hay personas que de verdad no pueden trabajar como ancianos y personas con impedimentos severos pero esos son una minoría.

Una persona que puede trabajar y cuando llega el tiempo de la revisión para beneficios dice que no puede esta mintiendo y robando del gobierno (de los contribuyentes en realidad) Esto incluye a las mujeres que cuando van a revisar los apartamentos de los residenciales esconden a sus "esposos" y todas las pertenencias de lujo. El pastor que sabe sobre esta situación y aun así le acepta las ofrendas y diezmos es copartícipe de la mentira y cómplice del robo. Hace tiempo que no predico en una iglesia y en la que actualmente soy miembro no me dejan porque en una ocasión cuestioné el porqué se estaba guardando tanto dinero y no se estaba ayudando a los que necesitan. aun así sigo siendo miembro por fidelidad y por tradición pues respeto a Dios. Ahora mismo en la isla de Puerto Rico hay miles de pastores que están robando y lo peor de todo es que como las iglesias son insituciones exentas de impuestos nadie se da cuenta y los que saben miran para otro lado.

Yo soy partidario de que a las iglesias que no demuestren que están relizando labor social se les cobre impuestos como a cualquier corporación. Una iglesia que no presta servicios sociales no sirve, es solo un club de gente que se reúne a escuchar a un pico de oro hablar de Cristo quien siempre fue pobre porque pensaba en los demás y no se servía a si mismo.