DANDO GRACIAS por el celular fallecido

Parte I- DANDO GRACIAS...por el celular fallecido

Hace aproximadamente 3 meses, me ocurrió algo bastante terrible. Cuando intenté encender mi celular para asegurarme de que todo estuviera bien y guardarlo en la cartera como de costumbre para luego ir a trabajar descubro que no hacía ni fu ni fa. Me pregunté cómo es posible si lo dejé funcionando en la noche, está sobre la mesa, no se cayó, no hizo indicios de que estuviera dañado. SIMPLEMENTE NO AMANECIÓ.

Fue terrible, porque dependía mucho de él; tenía la agenda, las citas, la lista de compras, las cuentas que faltaban por pagar, los teléfonos, los cumpleaños, era como una computadora. Pero de momento, recapacité y aunque me sentía no poco sino muy desilusionada dije para mí misma ALGO BUENO SALDRÁ DE ESTO.

Al siguiente día fui a la compañía a preguntar que pasaba con mi teléfono. Lamentablemente, la empleada lo declaró fallecido, no había remedio. Pero seguido a ello, me ofreció una oferta en la pagaba $30 menos, con dos nuevos servicios para los nenes y teléfonos nuevos.

Por eso siempre he creido en lo que dice Romanos 8:28 "Sabemos, además que a los que aman a Dios todas las cosas los ayudan a bien, esto es a los que conforme a su propósito son llamados." Una experiencia que pudo ser causa de una pelea, de estar malhumorada todo el día, o de desquitarme con los niños o con el jefe terminó siendo una bendición.

Hace unos días Prome tradujo un artículo muy interesante "Diez cosas por las cuales estar agradecidos", el cual te invito a que leas. En estos momentos, quiero darle gracias a Dios por MI CELULAR ROTO.

HESIONE