"Después de esto [la cruxifición], sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, dijo, para que la Escritura se cumpliera: ¡Tengo sed!" Juan 19:28
Hace pocos días se guardó lo que en nuestra cultura se conoce como la Semana Mayor. En algunas religiones se guarda como la conmemoración de la muerte de Jesús y en otras se celebra su resurreción y la relación íntima que desde entonces Jesús tiene con el ser humano através del Espíritu Santo. No importando la religión a la que se pertenece es una semana de recogimiento y reflexión espiritual.
Durante esta semana de suma importancia para la cultura cristiana puertorriqueña se predica basado en lo que se conoce como las 7 palabras. La escritura mencionada al principio se refiere a la quinta palabra; específicamente la expresión de Jesús "Tengo sed".
Vemos desde el Antiguo Testamento (Salmo 42) que la sed representa esa necesidad que el ser humano tiene de relacionarse con su Creador. Cuando esa relación no existe o no es continua se siente un vacío, una sensación de no estar completo. Esto se trata de llenar con diversos intereses y pasatiempos como deportes "extreme", fiestas, dedicando el tiempo a obtener dinero o a simplemente trabajar, teniendo diversas relaciones ílicitas e incluso dedicándose únicamente a la crianza de los hijos, entre otros. Algunas de estas conductas no son lícitas y otras sí. Pero aún las conductas lícitas cuando no están en balance se vuelven dañinas.
Siempre he dicho que Dios no nos ha pedido que le demos toda nuestra existencia, sólo nos ha pedido el primer lugar, lo que nos da espacio para dedicarle tiempo a nuestros hijos, nuestro esposo(a), nuestro trabajo y los intereses propios. Pero muchas veces ni siquiera el primer lugar estamos dispuestos a darle. Quizás una semana al año en época de Pascua es lo único que creemos que Dios merece, y por eso se acrecienta la sed espiritual del ser humano a tal grado que muchas veces no sabe qué rumbo seguir, porque sin Dios no hay dirección.
En la parte II veremos: QUÉ DICE MASLOW DE LA SED
No te lo pierdas mañana...
POR HESIONE