Este año la entrega de las estatuillas emasculadas de los Oscares tuvieron el rating más bajo en años. ¿Porqué? Por la misma razón que el fútbol americano está perdiendo audiencia y seguidores, la politización.
La gente está harta de Donald Trump. Vamos, usted se levanta y no hay medio que no lo mencione al menos una vez. Entonces viene uno a prender la tele a ver fútbol americano (no la basura de soccer, sino fútbol de verdad) y ve a ridículos como Colin Kaepernick y otros haciendo actos de protesta en el himno nacional. Prende la TV y las noticias se saturan de política y usted escucha Trump, Trump, Trump. Programas de de comentario buscan atacar la imagen de Trump buscando cualquier pretexto y meten política. Los Emmys se convirtieron en una plataforma política para otros que todavía les duele el corazón y no superan tener a Trump de presidente y la gente empezó a cambiar de canal y cayeron los rating. Los Golden Globes we convirtieron en la plataforma de Oprah y Seth Meyers para referirse a Trump y cayeron los ratings.
¿Que usted cree que iba a pasar en los Oscares? Este año tuvieron el peor rating en la historia porque está vez la gente ni se molestó en mirarlos porque sabían que iban a meter política.
Los medios liberales dicen que es culpa de Netflix y la internet. Eso es como Hillary que le echa la culpa de su derrota al machismo. La culpa no es de Netflix. Es la politización de un evento de entretenimiento. En verdad ya cansa. El establishment liberal de Hollywood está peor que una exesposa despechada que donde quiera ve algo malo que le recuerda a su ex marido (y no hay peor cosa que una mujer despechada). No superan la presidencia de Trump y piensan hacer como nenes chiquitos berrinches y los berrinches molestan. Nadie quiere ir a ver a un nene llorar.
La gente quiere entretenerse y mientras los medios sigan convirtiéndose en patios de kínder pa llorar la gente no los apoyará. Bueno, voy a ver mi serie en Netflix, ahí no mencionan a Trump.