Cuando de combatir la criminalidad se trata la lucha se debe llevar a cabo primero en las escuelas, en las mentes de los estudiantes, educándolos para que tengan una alternativa de superarse. Cuando se tienen que hacer más cárceles es demasiado tarde. La criminalidad es una enfermedad y cuando de enfermedades se trata es mejor prevenir que tener que remediar. El mejor antídoto para la criminalidad es la educación.
Acabo de leer un interesante estudio estadístico hecho por al Universidad de Berkeley que compartió el periodista Jay Fonseca. El estudio examinó si había una relación entre los niveles de educación y la criminalidad. No les voy a escribir las largas cifras estadísticas y explicaciones de como se llevó a cabo yo casi me duermo leyéndolo, saltemos a la conclusión:
Entre más educación tiene un individuo menores son las probabilidades de que incurra en actividad delictiva.
Educar a una pesona y permitirle llegar hasta niveles superiores de educación lo aleja del crimen.
Es sencillo, si un estado invierte más en la educación las personas tenderán a buscar superarse en la vida y una persona que quiere superarse no se mete en líos. Al haber menos criminalidad se puede invertir más en otras cosas necesarias como la salud y la educación. Lamentablemente al tener una situación criminal tan grave tenemos que invertir más en mantener a los presos adentro y en armar más policías. Nuestros estudiantes se quedan con lo que sobre y es por eso que vemos que muchos no les interesa hacer nada más y prefieren buscar el dinero fácil, ahí caemos en el círculo vicioso de la criminalidad.
El estudio reveló que los estados donde menos se invertía en la educación la criminalidad era mayor. Aquí en Puerto Rico tenemos una bendición, hay muchas instituciones educativas y tenemos una universidad estatal, la UPR. Lamentablemente el tener una universidad a la que no se puede acceder es como tener un piano en la casa y no poder tocarlo, ¿como se aprenderá música si no se practica?. De una universidad sale gente educada, con ideas y ambiciones ,ejor preparadas que pueden aportar a nuestro país. Sin embargo en vez de hacerle el acceso más fácil a la educación la gente del gobierno prefiere imponer una cuota ridícula que la mayoría de los estudiantes no pueden pagar.
¿Qué hace un estudiante que no puede entrar a la universidad? De seguro se quedará por ahí sin hacer nada más y para buscar dinero y mantenerse lo hará de la manera que sea. Muchos estudiantes hoy día no podrán ingresar a la universidad de Puerto Rico gracias a la política de Luis Fortuño. Si el crimen está alto ahora, espere a un par de años pa que vea como se va a poner esto.
Mucha gente criticó aquella estrategia de la mano dura de Roselló diciendo que los niños de aquella época son los criminales de hoy día. Dentro de poco estaremos mencionando la mano embrutecedora de Luis Fortuño quien al cerrar las puertas a la universidad lanzará a muchos jóvenes a la calle y en la calle solo se aprende a delinquir.
En la conclusión del estudio dice que la educación reduce el crimen. Yo concluyo que el restringir el acceso a esa educación fomenta el crimen. Ese será el legado de Luis Fortuño. Si de verdad él quisiera hacer algo por mejorar este país que haga la educación univesitaria accesible y gratis a todos los que quieran para que vea una reducción en el crimen.
1 comentario:
Mientras menos tenga una persona que perder, más probable que se atreva a cualquier cosa. No hay ni que hacer un estudio para saber eso.
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